Hoy es el Día del Amor y la Amistad, una fecha en la que todo se llena de detalles, mensajes bonitos y muestras de cariño más visibles. Y sí, es lindo ver tanto amor circulando, pero… ¿qué pasa con el resto del año? El amor—en cualquiera de sus formas—no debería celebrarse solo un día. No se trata de esperar al 14 de febrero para decirle a alguien cuánto lo quieres, ni de pensar que un regalo material es la única forma de demostrar afecto. El amor está en los gestos diarios, en los mensajes espontáneos, en el apoyo incondicional, en estar presente. Amar es hacerle el café a alguien porque sabes cómo le gusta, es preguntar “¿cómo te fue hoy?” y escuchar con atención la respuesta. Es un abrazo cuando más se necesita, es respetar los silencios y celebrar los logros, por pequeños que sean. Así que sí, disfrutemos este día, hagamos que sea especial, pero recordemos que el amor verdadero no vive en una fecha en el calendario. Vive en los pequeños momentos de todos los días. ¿Y tú? ¿Cómo cult...
Cuando hablamos de límites en la crianza, muchas veces pensamos en restricciones, castigos o en una autoridad rígida que impone reglas sin explicación. Pero, ¿y si te dijera que los límites bien puestos son una muestra de amor? Los niños necesitan estructura, saber hasta dónde pueden llegar y qué se espera de ellos. Sin límites, se sienten inseguros y pueden volverse desafiantes porque buscan respuestas. Pero aquí está la clave: los límites no se tratan de imponer, sino de guiar. Imagina que eres un niño aprendiendo a andar en bicicleta. Si te dejan en una carretera sin señales ni reglas, probablemente te sentirás inseguro. Pero si tienes un camino claro, con bordes bien definidos y alguien acompañándote en el proceso, todo cambia. Eso mismo pasa con los límites. Entonces, ¿cómo ponerlos sin caer en el “porque yo digo” o en el extremo de ser demasiado permisivos? Sé claro y firme, pero sin ser autoritario. No es un “hazlo porque sí”, sino un “esto es importante por esta razón”. Escucha...